Me siento frente al papel en
blanco
No me gusta verlo así
Tengo que darle vida
Escribir sobre su piel
Cierro los ojos y remuevo mi
pasado en busca de una historia que contar
Es entonces cuando mi corazón comienzan
a derramar lagrimas al recordarte
Mis palabras dirigidas a la luna,
rogándole por un amor fueron escuchadas
Descendiste de los cielos con unas
enormes alas negras y un largo y oscuro cabello que hacia destacar tus verdes
ojos
Me cogiste de la mano y con el
sonido celestial de tu palabras prendiste fuego a mi alma
Recuerdo a ver andando descalza
sobre la hierba hasta llegar a la orilla de un lago
Nuestros pies juguetearon con el
agua y se enredaron a la mínima oportunidad
Pasamos largo rato riendo y
hablando sin parar hasta que mis labios sintieron ansias de rozar los tuyos y
robarte así el que seria mi primer beso de amor.
Suavemente me deslice hasta tu cálido
cuerpo y te acaricie el rostro.
Te giraste con una amplia sonrisa
acercándote aún mas a mi.
Creímos que ya nadie podría
estropear este momento, pero nos equivocamos
La luna celosa de nuestro romance
ardió en furia
Tu me cobijaste bajo tus alas en
un abrazo mientras ella te explicaba tu futuro
Te dio a elegir la vida eterna que
llevabas o
Vivir una vida mortal a mi lado y
en la muerte descansar en los infiernos.
Oí como tu corazón se aceleraba
bruscamente
Yo no sabia que hacer ni que
decir…
En cambio tu, lo tuviste claro y
me besaste eligiendo así tu destino
La claridad de la luna quemo tus hermosas
alas mientras tu gritabas de dolor
Lo único que puede hacer fue
estrecharte entre mis brazos cuando te desplomaste
Las estrellas que lo observaron
todo no de acuerdo con su dueña nos concedieron un deseo.
Entre llantos las pedí que en la
muerte en cielo te acogieran.
Así fue como conseguí que mi único
y verdadero amor , volviera al firmamento como el ángel de aquella mágica
noche.
Ahora, a la espera mi muerte, lo
único que me hace feliz es alzar la vista y saber que esta ahí.
Pero, que es lo que ven mis ojos?
Es imposible que pueda estar
viendo aquellas acogedoras alas negras que me rodean en mis recuerdos.
Con miedo a que no sea real, extiendo
mi mano hacia la suya y noto su cálida piel
Siento que exhalo mi ultimo
suspiro y le oigo susurrarme:
No te abandone en
vida, tampoco lo are en la muerte.
De esta forma comprendí, que el
verdadero amor jamás muere.